Tras la muerte de Kirk, se inicia una intensa búsqueda del sospechoso

Kirk, de 31 años, fue asesinado a tiros el miércoles en el campus de la Universidad del Valle de Utah en Orem, Utah, donde se encontraba como orador invitado. El tirador sigue prófugo. Según informes, es posible que haya atacado a Kirk desde una azotea.

Kirk fue un influyente representante del movimiento "Make America Great Again" (MAGA) del presidente estadounidense Trump y lo apoyó en su campaña electoral. Millones de personas seguían sus redes sociales y podcasts.

Más de 7.000 pistas recibidas

Según información oficial, hasta la fecha se han recibido más de 7.000 pistas. Se han realizado casi 200 entrevistas. Se descubrió una posible arma homicida en un bosque.

El gobernador republicano de Utah, Spencer Cox, declaró el jueves por la noche (hora local) que se están realizando preparativos para solicitar la pena de muerte. Cree que se trata de un "asesinato político".

El ataúd que contenía el cuerpo de Kirk fue trasladado de Utah a Arizona, donde, según se informa, vivía el podcaster, acompañado por el vicepresidente J.D. Vance y su esposa, Usha Vance. Imágenes de televisión mostraron a la esposa de Kirk bajando de un avión, sostenida por Usha Vance. Trump declaró en Washington que esperaba asistir al funeral.

El Departamento de Estado de EE. UU. amenaza con consecuencias

Mientras tanto, el Departamento de Estado de EE. UU. amenazó a los extranjeros con consecuencias si justificaban la violencia en línea. El subsecretario de Estado, Christopher Landau, escribió en la Plataforma X el jueves, sin mencionar el nombre de Kirk: «Ante el horrible asesinato de una figura política destacada ayer, quiero enfatizar que los extranjeros que glorifican la violencia y el odio no son bienvenidos en nuestro país».

Landau continuó diciendo que había dado instrucciones a los representantes consulares para que tomaran medidas, sin proporcionar detalles. En su mensaje, el subsecretario de Estado instó a la ciudadanía a reportarle los comentarios de extranjeros para que el Departamento de Estado pudiera "proteger al pueblo estadounidense". No proporcionó ejemplos ni pruebas de presuntas acciones de extranjeros.