Un simple cambio de Wi-Fi acelerará instantáneamente tu conexión a internet; revisa tu router ahora.

No es ningún secreto que anhelamos velocidades de banda ancha más rápidas. Tener una conexión a internet decente es fundamental para los millones de personas que trabajamos desde casa, descargamos juegos en consolas y vemos películas en streaming sin parar en Netflix y Disney+. Claro que no podemos cambiar la velocidad de la conexión, ya que depende de la calidad de la tecnología de nuestro proveedor de servicios de internet (ISP) y de lo que estemos dispuestos a pagar.

Dicho esto, hay muchas cosas que puedes hacer dentro de casa para asegurarte de que la conexión a internet circule por las habitaciones de la forma más fluida posible, y uno de los puntos de partida es tu router Wi-Fi.

Este dispositivo es vital para alcanzar las mejores velocidades, y tener algo obsoleto en un rincón de la habitación no ayudará en absoluto.

De hecho, según el equipo de Community Fibre, cualquier persona que tenga un router (hub) de 5 años o más debería considerar cambiar a algo más moderno sin demora.

Sencillamente, los routers antiguos no pueden seguir el ritmo de las necesidades modernas, como la transmisión en 4K, las descargas múltiples y el teletrabajo.

Community Fibre explicó con más detalle: "Es posible que los routers antiguos no sean compatibles con los estándares WiFi modernos, como el WiFi 6, que ofrece mayor velocidad y mejor cobertura. Si su router tiene más de cinco años, podría ser el cuello de botella".

"Los routers más nuevos están diseñados para gestionar más dispositivos y reducir las interferencias. Actualizarlos puede marcar una gran diferencia, especialmente en hogares con mucha actividad."

Si llamas a tu proveedor de internet, deberías comprobar si ofrece una mejora de plan. Algunas incluso podrían ser gratuitas.

Si no, también hay muchos routers Wi-Fi 6 e incluso routers Wi-Fi 7 mejorados en el mercado, que ayudarán a aumentar las velocidades.

La antigüedad del router puede influir en el rendimiento. Community Fibre recomienda mantener el dispositivo alejado de cualquier cosa que pueda interferir con la señal.

“Las señales WiFi se debilitan al atravesar paredes, muebles o electrodomésticos. Colocar el router en un armario, detrás de un televisor o cerca de objetos metálicos puede reducir drásticamente su rendimiento”, explicó el proveedor británico.

En su lugar, coloque el router en un lugar central y elevado, idealmente sobre un estante o en un soporte de pared, y lejos de otros aparatos electrónicos grandes como los microondas.

Algunos dispositivos como monitores para bebés, aparatos de radio y altavoces Bluetooth pueden causar interferencias en la señal, y otros (por ejemplo, espejos, peceras, chimeneas, paredes) introducen atenuación de la señal, donde la intensidad de la señal se debilita al pasar a través de ellos.

Por último, conviene comprobar el grado de congestión. Si pensamos en la conexión de banda ancha como en una autopista, entenderemos mejor por qué a veces se producen ralentizaciones. Cuanto mayor sea el tráfico en los cables, más lenta será la conexión.

“Cada dispositivo conectado a tu WiFi comparte el ancho de banda disponible”, agregó Community Fibre.

“Si en tu hogar se están utilizando plataformas de streaming, videojuegos y videollamadas simultáneamente, la velocidad puede desplomarse.

Desconecta los dispositivos que no estés usando y considera programar las descargas grandes fuera de las horas pico. Si tienes la opción de conectar por cable los dispositivos que no se mueven, esto ayudará a aliviar la congestión. Algunos routers también te permitirán ajustar su configuración para priorizar el tráfico de llamadas de trabajo o streaming.